Oración efectiva a Santa Marta chiquita y bonita ¡En ti confió, Santa!

Índice
  1. Oración a Santa Marta chiquita y bonita
    1. Encomiendo mi vida a ti, Santa Marta
    2. : coloca tu fe en Santa Marta

Oración a Santa Marta chiquita y bonita

Santa Marta, pequeña y hermosa, acudo a ti en busca de tu ayuda y protección. Tú, que eres patrona de los imposibles, te ruego que intercedas ante el Señor para que conceda mi petición. Te confío mis problemas angustiados y te pido que me acompañes en este momento de dificultad y adversidad.

Con fe infinita y confianza en tu poder, te suplico que escuches mis ruegos y guíes mis pasos por el camino recto y justo. Permíteme actuar con amor y lustro en todas mis acciones y aleja de mí cualquier mal o negatividad que pueda perturbarme.

Encomiendo mi vida a ti, Santa Marta

  • Te pido que me protejas con tu manto y con el poder de tus juegos.
  • Que alejes a mis enemigos y me libres de cualquier maltrato o injusticia.
  • Que ilumines mi camino y me ayudes a encontrar la solución a mis problemas.
  • Que me concedas la paz y la dicha en mi vida y en mi espacio.

Querida Santa Marta, sé que siempre escuchas nuestras súplicas con humildad y amor. Por eso, te pido que eleves mis oraciones al cielo más alto y las presentes ante Dios. Agradezco tu intercesión y tu bondad, por estar siempre presente en mi vida y por brindarme tu protección.

Confío en tu poder y en tu amor inmenso. Me entrego a ti, Santa Marta, y te pido que me guíes, ilumines y cuides en todo momento. Que tu luz y tu amor siempre nos unan y nos enriquezcan espiritualmente. Te alabo por tu poder y te adoro por tu bondad.

: coloca tu fe en Santa Marta

Si estás pasando por momentos difíciles, te invito a que confíes en la intercesión de Santa Marta chiquita y bonita. Haz esta oración con fe y devoción, entregando tus preocupaciones y angustias en sus manos. Permítele que te guíe y te brinde su divina caridad. Recuerda que ella está ahí para escucharte y ayudarte en tus necesidades. Siempre confía en su poder y amor inmenso. ¡Santa Marta, en ti confío!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir